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Covid-19 y gastronomía

Las 7 tendencias que están definiendo el mundo de la gastronomía

Un estudio analizó hacia dónde va el sector gastronómico ahora que se levantaron las restricciones.

Estos dos últimos años, el sector gastronómico se ha enfrentado a múltiples desafíos. La pandemia obligó a todos a repensar su trabajo, luego de que la cuarentena forzará el cierre de bares y restaurantes.

Fue así como aquellos que sobrevivieron a la catástrofe tuvieron que reinventarse muy rápido. Hubo que impulsar los servicios de delivery, ajustar el número de empleados y tamaño de los menús, y enfrentar la situación de que los clientes se pusieran a cocinar en sus casas mucho más que antes.

Profundos cambios

Ahora queda claro que el sector gastronómico sufrió profundos cambios, que serán permanentes, de la misma forma que se transforman los comportamientos de los consumidores. Un estudio de la consultora Apicbase presentó las 7 tendencias que ya están definiendo el mundo de la gastronomía.

El delivery llegó para quedarse

Por más que, probablemente, los pedidos a domicilio decayeron tras la pandemia (su elevado costo y la necesidad de salir son los principales motivos), todo indica que el delivery va a seguir presente en el modelo de negocios de bares y restaurantes. Es que los clientes ya no consideran al establecimiento gastronómico como un lugar donde sentarse y comer, ahora lo ven como una marca alimenticia con la cual pueden interactuar de diversas maneras.

La tecnología, pilar de la gastronomía del futuro

El sector debió invertir en tecnología para adaptarse a las nuevas demandas de sus clientes. Un aspecto a considerar como esencial para el éxito de cualquier emprendimiento gastronómico está relacionado con el software que se emplee para la gestión de todo restaurante, bar, cafetería, pizzería o delivery.

Temas como sistemas de gestión, sistemas POS y softwares especializados hacen la diferencia a la hora de organizar la gestión inteligente, administración de restaurantes, manejo de comandas, delivery e inventarios.

El uso de estas herramientas de software es un aliado imprescindible para maximizar las ventas y mejorar la experiencia con los clientes, quienes se están acostumbrando cada vez más a los menús con código QR y los sistemas de pago “contact less”.

Diseño del menú, un aspecto clave

Los empresarios del sector tuvieron que pensar menús mejor adaptados a esta nueva realidad, con tal de asegurarse los ingredientes necesarios, y a precios accesibles. El nuevo diseño del menú también pasa por “achicar la carta” y reducir la cantidad de platos ofrecidos, para hacerlo más eficiente, minimizando el despilfarro y aumentando los márgenes de ganancia.

Cambia el rol del personal

Ya se sabe que el sector, tras la pandemia, enfrenta la falta de personal calificado. Por eso, debe capacitar más rápido y mejor a los nuevos empleados, quienes tendrán que aprender a ser “multitasking”, a excepción de unos pocos, que seguirán especializándose en sus tareas habituales.

El personal deberá también involucrarse más como “embajadores de la marca” del establecimiento, teniendo en cuenta que los canales de venta se diversificaron y sofisticaron, con tal de ayudar a mejorar la experiencia de los clientes.

Las franquicias y las cadenas van a ser las grandes ganadoras

Frente al cierre de miles de bares y restaurantes, se demostró que las grandes cadenas y franquicias resisten mejor la crisis, gracias al apoyo de las redes creadas por estas empresas.

Las locaciones serán menos importantes

Si antes, una parte importante del éxito de un negocio gastronómico consistía en estar bien ubicado en una esquina, calle o avenida transitada, en la post pandemia no será tan esencial. Esto se debe al auge de las “cocinas fantasma”, que preparan platos en locales sin salón comedor, impulsadas por el boom del delivery y apoyadas en el uso de la tecnología y los sistemas de gestión gastronómica.

Los clientes exigen más en materia de higiene y seguridad alimentaria

Los comensales pasaron a ser más exigentes en estos aspectos. Antes, esto no era prioritario para muchos bares y restaurantes, todo con tal de reducir costos.
Pero ahora, eso implica mantener un mayor espacio entre mesas, que los empleados sigan usando barbijos y ofrecer puestos sanitizantes con alcohol en gel para desinfectar, así como instalar sistemas de purificación del aire y de control de niveles de dióxido de carbono en salones interiores.